El director nacional del Servicio Nacional de Migraciones (SERMIG), Luis Eduardo Thayer, participó en la presentación del proyecto “Fortalecimiento de las capacidades de los sectores público y privado para aprovechar los aportes de la migración internacional y facilitar su inclusión social y laboral en Chile y Uruguay”, impulsado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) con apoyo del Gobierno de Canadá.
La iniciativa, que se ejecutará hasta 2027, contempla la producción de información sobre perfiles laborales y necesidades del mercado, además del fortalecimiento de los institutos nacionales de estadística para generar y utilizar datos sobre migración laboral. Asimismo, busca consolidar diálogos sociales tripartitos entre gobiernos, empleadores y trabajadores, y potenciar programas de certificación de competencias, empleabilidad y autoempleo, con foco en mujeres y jóvenes.
Durante su intervención, Thayer subrayó la relevancia del proyecto para el país: “el talento y la energía de la migración son una oportunidad para el desarrollo, por lo que este proyecto permitirá avanzar en políticas más eficaces y en herramientas concretas que faciliten la inclusión laboral, fortaleciendo la colaboración entre el sector público, privado y los trabajadores”.
El director de SERMIG destacó además que esta iniciativa se alinea con la “Ruta de la Empleabilidad” lanzada en 2024, que facilita la conexión entre oferta y demanda laboral, y con otros procesos en marcha para consolidar la integración de la población migrante en Chile.
El proyecto se implementará en colaboración con CELADE, División de Población de la CEPAL, y contará con la asistencia técnica de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). En el lanzamiento también participaron representantes de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), quienes coincidieron en la necesidad de generar consensos que permitan avanzar en políticas inclusivas y responder a los desafíos del mercado laboral.
Con este esfuerzo conjunto, Chile y Uruguay refuerzan su compromiso con una migración segura, ordenada y regular, contribuyendo a la construcción de sociedades más inclusivas, productivas y sostenibles.